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¿Qué comer en Jordania? Jordania es un país con una cultura exquisita, tanto en tradiciones y religión como en sus comidas. Desde lugares antiguos, hasta desiertos rojos, este país está lleno de paisajes inigualables. Sin duda un viaje que no puedes dejar de hacer si eres amante de la cultura y la historia.
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Sin embargo, esto no es todo lo que tiene Jordania para ofrecer, pues sus platillos más deliciosos y tradicionales también son una excusa perfecta para conocer este país. Es por esto que hoy te contamos qué comer en Jordania si estás de paso por este país.
Una mezcla de actualidad con historia es lo que define sin duda la comida jordana, pues encuentras en sus platos las tradiciones beduinas como la diversidad de las diferentes culturas que han dejado su rastro en esta tierra.
Desde el falafel más crocante hasta un té dulce, la exploración gastronómica de Jordania es también uno de los recorridos que no puedes perderte cuando viajes allí. Aquí te decimos qué comer en Jordania y por qué no puedes dejar de probar estos platillos.
El plato nacional de Jordania, esta fuente de cordero, arroz y yogur fermentado, como era de esperar, se puede encontrar en todo el reino. Los destinos gastronómicos populares de Ammán, como Al Quds y Sufra, le servirán una generosa ración del fragante y abundante plato principal. Los aderezos suelen incluir almendras, piñones tostados, perejil, rodajas de limón y una generosa dosis de aceite de oliva.
Si bien la popularidad de muchos de los aderezos y salsas de Jordania ha hecho que viajen por todo el mundo, el labneh permanece en gran parte localizado en el Medio Oriente. Un yogur cremoso y colado que se puede hacer con leche de vaca, cabra u oveja, tiene un toque ligeramente salado y lo encontrarás incluido en casi todos los entremeses, tan omnipresente para los lugareños como el hummus o el baba ghanoush. A diferencia de esos dos estándares, la falta de tahini de labneh le da una textura única, a medio camino entre un queso untable y un yogur griego. Disfrútelo cubierto con piñones, hierbas y aceite de oliva, o miel, si prefiere una opción más dulce.
Tomates fritos, estilo Jordan: la galayet bandora es otro plato principal que suele acompañarse de arroz o pan, popular por su sencillez y su sabroso sabor. Guisados en una sartén, los tomates se cuecen con cebolla, ajo, aceite de oliva y sal. Los pimientos a veces se agregan para calentar más, mientras que otra variación popular es agregar cubos de carne para crear un guiso. Un plato con un vínculo orgulloso con la historia de Jordania, esta comida en una olla es la favorita de las tribus nómadas y los viajeros en las regiones del Mar Rojo y Wadi Rum debido a la facilidad con la que se puede cocinar.
Oriente Medio es un paraíso para los amantes del pan y Jordania no es una excepción. Si desea algo más exótico que una pita confiable que se ha horneado a la perfección, pruebe el ka’ak. Una opción popular en Jordania que literalmente se traduce como “pastel”, en realidad es un pan cubierto de sésamo horneado en forma de anillo grande o un rollo de leña abierto en rodajas y relleno con huevo, queso y salsa de chile. La panadería Salaheddine en King’s Street, Amman, es adónde dirigirse si está interesado en probar lo último. Para que las cosas sean rápidas y asequibles, los clientes preparan su propio relleno y luego lo disfrutan como refrigerio sobre la marcha.
Un plato que premia la paciencia, makmoura se traduce como “enterrado” y se prepara alternando capas de masa con cordero o pollo, cebollas y una variedad de semillas y amadas especias regionales como el zumaque y el comino. Originario del norte del país, hace un uso generoso del aceite de oliva cosechado en esa región y puede tardar hasta cuatro horas en cocinarse, después de lo cual se corta en rodajas y se sirve en gajos con forma de pastel con su contenido derramado sobre el plato junto con porciones de arroz y repollo.
Esta capa crujiente de hojaldre está cubierta de queso crema, de cabra o picante y bañado con un jarabe dulce que generan sensaciones increíbles en tu boca. Se dice que este postre se extendió por la región gracias al imperio otomano, que junto con el café turco formaban parte de los desayunos de esta cultura.
De todos los restaurantes en Jordania donde puedes comer kunafa, el Habibah Sweets de Amman será el que te deje con las ganas de pedir más.
Si no conoces el falafel te digo que te estás perdiendo una de las mejores comidas de la vida. Estas bolitas crujientes a base de puré de garbanzos condimentados, son un básico popular de la comida de calle de Jordania.
Si no sabes qué comer en Jordania solo debes salir y pedir unos falafels acompañados con salsa de berenjenas para sentir un pedacito del cielo en tu boa. El restaurante Hashem de Amman te servirá el falafel de una manera especial con hierbas de menta y cebollas crudas que lo convertirán en una adicción para ti.
Este plato de pollo con arroz, papas y verduras en un clásico hogareño, sim embargo podrás encontrar algunos lugares donde te lo sirvan. El pollo se hace a fuego lento y en una cocción prolongada para darle jugosidad y mucho sabor.
Al servir el plato verás un pastel de arroz con verduras y trozos de pollo de manera ordenada que harán que saltes directo a la comida. Puedes aprender a hacer este plato en la escuela de cocina Beit Sitti, que es un lugar donde también se sirve comida casera al público.
Si no sabes que un hummus a estas alturas de tu vida, es en serio que te has perdido mucho del mundo de la comida. Este platillo es originario de Medio Oriente, pero se popularizó en casi todo el mundo y podríamos decir que casi no hay país donde no sea conocido.
Pero saborear un hummus en el lugar de donde este ha nacido sin duda puede ser una experiencia sorpresivamente deliciosa. Este puré de garbanzos se sirve con trozo de pan de pita, piñones y aceite de oliva.
Si deseas una versión más sofisticada podrás ir al restaurante Amman’s Hashem, donde te lo servirán con hierbas picantes y cebollas crudas.
Los beduinos son una de las culturas más puras que todavía viven en Jordania. Estos nómadas del desierto aún conservan el estilo de vida y tradiciones desde sus inicios. Y es por eso que no puedes dejar de comer un plato de carne con verduras, que se cocina en un hoyo cubierto de arena del desierto: el Zaarb.
Como es costumbre este plato se come bajo las estrellas del desierto alrededor de una fogata, y sin duda saborear esa tierna carne en los paisajes nocturnos de la arena roja te harán sentir fuera de este mundo.
Como has visto hay mucho que comer en Jordania y aunque te mencionamos solo algunos de los platos más populares, todavía hay mucho más por probar y descubrir.
